Damasco es la capital de Siria y la segunda ciudad más grande en extensión después de Alepo. Con más de 4000 años de historia, Damasco es un valioso centro cultural y religioso de la región del Levante. Pero Damasco es también una ciudad rota por la guerra.
En Damasco, en toda Siria, hay muchas historias que contar, de heridas y de reconstrucción, del país y de sus habitantes. Una de ellas, es la de Said, que llegó a España en 2014 huyendo de la guerra.
“Cuando llegué a España, no tenía nada. Me sentía desnudo de derechos. Yo me sentía mal psicológicamente por lo que había vivido. Necesitaba protección para mí y para mi familia”.
ONG Rescate le acompañó el proceso de protección internacional, apoyándole a él, a su mujer y a su hija pequeña en la construcción de su nueva vida en España. William Gil, coordinador de Atención Directa de ONG Rescate, afirma que para Said hubo un paso fundamental en su desarrollo dentro de España. Se refiere al programa Befriending.
“Befriending es un sistema de voluntariado creado para incentivar una red social de apoyo a las personas refugiadas que se encuentran en España. Con el proyecto facilitamos su contacto con personas locales y completamos un círculo maravilloso de sensibilización”.
Para Said, la importancia del proyecto Befriending prevalece sobre otros tipos de ayuda material, ya que a él le dio las herramientas con las que formar un vínculo afectivo que no tiene precio.
“Befriending me ayudó a fortalecerme como ser humano con plenos derechos, aprendí en cada encuentro sobre el idioma y la cultura del país que me abrió las puertas”.
Hoy, Said agradece haber conocido Befriending y a las personas voluntarias con las que le unió el proyecto, porque le dieron la fortaleza para afrontar los obstáculos que se le presentaban y asumir retos para él y su familia.
“Yo agradezco a España que me haya acogido de esta manera, porque me han brindado protección y no me he sentido diferente aquí. Siria tiene problemas, llevamos 7 años en conflicto. Hay miles de niños muertos. Si el mundo quisiera acabar con esta guerra, se podría. Pero no lo hacen. Deseo que se acabe ya”.
Said y su familia son algunas de las personas refugiadas que se han beneficiado en 2019 del proyecto Befriending Madrid financiado por la Comunidad de Madrid. Un proyecto en el que la amistad y la relación de voluntariado y personas refugiadas se da en un plano de igualdad, intercambio cultural y apoyo.