Aurora Martín/Lurdes Calvo (ONG Rescate). La sonrisa orgullosa de Fawsiya asoma entre el verde brillante de los maizales. Hace pocos meses, estos campos que ahora se muestran exuberantes aparecían ante nuestros ojos como un erial. Una zona árida que sin embargo escondía un suelo todavía fértil: solo había que saber cómo tratarlo. Fawsiya Abdi es una de las mujeres que conforman la cooperativa agrícola Allenley, en Gode, región Somalí de Etiopía, un territorio especialmente vulnerable a los efectos del cambio climático y que cuenta con una alta tasa de población refugiada y desplazada. En los últimos años las sequías, inundaciones y la erosión eólica potenciada por el cambio climático han hecho avanzar al desierto, poniendo a la población en permanente riesgo de padecer hambre.
Fawsiya forma parte de uno de nuestros proyectos en Etiopía, con el que desde ONG Rescate apoyamos a las cooperativas agrícolas de Gode para que aumenten su producción de alimento, diversidad y productividad, fortaleciendo a la vez el papel de la mujer dentro de la comunidad, y reforzando la resiliencia de la población frente a la amenaza de la inseguridad alimentaria.
En pocos meses, gracias al nuevo sistema de riego y a las semillas y herramientas provistas por ONG Rescate, Fawsiya y las otras integrantes de su cooperativa han podido plantar cinco hectáreas de cebollas, maíz, sorgo, forraje, tomates, judías e incluso frutales como mangos y limones. En una tierra con un frágil equilibrio ecológico, la sostenibilidad es clave: la formación de las agricultoras, la rotación de cultivos y el consiguiente ahorro de agua han permitido convertir lo que antes era un secarral en un vergel. Pero, sobre todo, ha llevado a las cooperativas una soberanía alimentaria que les permite decidir qué, cuánto y dónde cultivar con nuestro apoyo, y no solo para su autoconsumo, sino también para la venta en el mercado local, convirtiendo a estas mujeres en agentes del dinamismo económico de sus comunidades.
Fawsiya sonríe, agradecida, pero somos nosotras quienes agradecemos su esfuerzo y ejemplo, porque si las comunidades en Gode se enfrentan cada día a situaciones muy duras en condiciones muy vulnerables, las mujeres somalís son las que se llevan la peor parte. Y Fawsiya Abdi, como mujer y como mujer somalí nos demuestra que siempre hay energías, fuerza y sonrisas para continuar luchando y mejorando.
El doble reto etíope
Etiopía, el segundo país más poblado de África, se enfrenta a dos de los desafíos más extendidos de nuestro tiempo: es uno de los principales países de acogida de personas refugiadas, y de los más vulnerables a las consecuencias del cambio climático.
El país, situado en el Cuerno de África entre Somalia y Sudán del Sur, es el tercero de África en número de personas refugiadas acogidas, con más de 900.000. A ellas se suman los 3,2 millones de etíopes desplazados dentro del país por conflictos políticos, interétnicos y desastres naturales. Precisamente son estos desastres el otro gran problema al que debe hacer frente un estado con uno de los índices de desarrollo humano más bajos del mundo (IDH), en el puesto 173.
El cambio climático ha exacerbado en las últimas décadas fenómenos como sequías e inundaciones, poniendo en grave riesgo la seguridad alimentaria de la población, en su gran mayoría dependiente de la agricultura y el pastoreo.
En este contexto, ONG Rescate trabaja desde 2001 en
Etiopía
con una misión fundamental: aumentar la resiliencia de las comunidades locales y refugiadas frente a estos desastres naturales, y reforzar el papel de la mujer en una sociedad con una fuerte tradición patriarcal.
Aurora Martín es la persona expatriada responsable de los proyectos de ONG Rescate en Etiopía.
Lurdes Calvo es Responsable de Comunicación de ONG Rescate.