Por Aurora Martín*

Y así lo demostraron los hombres y mujeres con las que trabajamos dentro del marco del marco del Convenio que ONG Rescate tiene junto a la Fundación por la Promoción Social y nuestras contrapartes locales (ECC-SDCOH y HAVOYOCO), así como el apoyo de Mario Fanjul, de la Oficina Técnica de Cooperación.

A través de estrategias y metodologías conjuntas, hemos gritado al unísono que los derechos de las mujeres son derechos humanos y que hay que seguir concienciando y trabajando para alcanzar la tolerancia cero contra la mutilación genital femenina (MGF), el matrimonio infantil y otras violencias contra las mujeres. 

El pasado sábado 7 de marzo ya calentamos motores junto con nuestra contraparte Havoyoco, que, gracias a la magia y el encanto de los malabares, acrobacias y performance, despertaron el interés de los niños y niñas, hombres y mujeres de la comunidad de Gursum. 

Desde el gobierno local, representado por la directora de la Oficina de la Mujer, y todas las partes involucradas sonó y se mostró un mismo mensaje, un mismo sueño: la necesidad cuestionar los roles de género, de fortalecer los derechos de las mujeres y erradicar las prácticas dañinas como la MGF y la violencia machista intrafamiliar.

Las palabras de nuestra compañera y experta en género, Suhur Ahmed, fueron un soplo de inspiración para que las niñas continúen sus estudios y cuenten con el apoyo familiar. Además, recordó que el espacio público también nos pertenece a las mujeres y animó a todas y cada una perseguir sus sueños.

“Los derechos de las mujeres se han de respetar y para ello es necesario erradicar la MGF desde hoy”. Este fue el mensaje protagonista del seminario sobre los Derechos de las Mujeres, celebrado en la comunidad de Shebele. El acto contó con el apoyo del Gobierno local y con nuestra contraparte ECC-SDCOH, y con la presencia de niñas y niños, grupos escolares, mujeres y hombres y líderes religiosos. 

Kuresh, directora de la Oficina de Salud, explicó las terribles consecuencias a corto y largo plazo de esta práctica y consiguió que todo el público alzase la mano mostrando su rechazo hacia la MGF. El sheik, líder musulmán, de la comunidad informó que esta práctica no corresponde a su cultura ni viene recogida en el Islam, y por lo tanto puede ser abolida. Como broche final, se dio espacio para que el grupo de niñas del colegio alzaran la voz y se reconoció públicamente el valor de aquellas niñas que no han sido víctimas de la MGF así como a sus madres, mujeres ejemplares en la comunidad. 

Celebramos los avances conseguidos contra esta práctica, sin embargo, no podemos ignorar las alarmantes cifras: más del 75% de las mujeres en la región somalí de Etiopía son víctimas de la Mutilación Genital Femenina. Las prácticas han ido cambiando, y de realizar la denominada “mutilación faraónica o infibulación” (extirpación del clítoris, labios menores y mayores) ahora tenemos además el desafío de erradicar la “mutilación sunna” (extirpación del clítoris), aceptada en muchas comunidades por considerarla menos dañina e incluso aconsejada por líderes religiosos. 

El reto es incuestionable, pero el derecho de las mujeres es una prioridad y para ello seguiremos luchando junto a nuestras contrapartes locales, al gobierno local, las comunidades, las niñas y las mujeres, los niños y los hombres; para que ninguna mujer sea víctima de la MGF. Seguimos trabajando, cada 8 de marzo y todos los días restantes del año.